La rosa del desierto es una vibrante planta conocida por sus llamativos tonos vivos y naturales. Amante de la luz solar, crece en verano donde recibe fácilmente hasta seis horas de alta temperatura. Se puede obsequiar como ramo decorativo o como compañero en un jardín.
Para los amantes de las flores bonitas, exóticas y misteriosas, la rosa del desierto es un deleite. No solo por sus tallos suculentos, sino por sus peculiares hojas verdes alegres. Consiguiendo una flor brillante que despierta interés en las personas debido a sus peculiares características.
Teniendo lo anterior en cuenta, hemos decidido hablar sobre una flor bonita, elegante y tan vieja como la rosa misma. Si eras amante de la jardinería, o te encantan los arreglos florares, este artículo es para ti. Desglosaremos en detalle una significativa y especial planta amada en diversos países del mundo.
Indice de contenido
¿Qué es la rosa del desierto?
La rosa del desierto es una flor nativa de África oriental galardonada por sus diseños espectaculares. También conocida como adenio, o por su nombre científico ‘Adenium Obesum’, es una planta en forma de tronco que ofrece racimos coloridos similares a las trompetas, en una variedad de colores rojizos.
Este tipo de rosa se da en los ambientes cálidos, con entrada de la luz solar, como las terrazas y los jardines. Sin embargo, con el cuidado correcto y la exposición constante al sol, se puede mantener en el interior. Crece libremente, ha formado parte de diversas culturas y es bien recibida por los amantes de la jardinería.
Características de la rosa del desierto
La rosa del desierto es una planta especial, muy hermosa, elegante y cálida. Pero, ¿cuáles son realmente sus características? A continuación, señalaremos rasgos definitorios de una flor única entre miles.
- Diseño. La forma de la rosa del desierto es de tronco, aunque algunas personas coincidieran que tiene un parecido al bonsái. Posee un camión grueso, ensanchado y hojas brillantes de color verde resplandecientes. En cuanto a sus flores, tienen forma de trompeta y surgen en una variedad de colores que incluye blanco, rosado y morado.
- Savia. La rosa del desierto produce una savia que es tóxica en el peor de los casos. Se cataloga como un líquido irritante, mientras que la planta como tal es mencionada en una lista de flores venenosas que deben estar alejadas de los más pequeños del hogar y las mascotas curiosas.
- Clasificación. La rosa del desierto no es una rosa como tal. De hecho, no pertenece a la familia de esta especie. Clasifica como mineral de hoja cauda, donde solo existe una reducida variedad de opciones disponibles a la venta.
- Forma y tamaño. Estas flores no poseen un tamaño o forma pre-determinada, sino que dependiendo de las condiciones climáticas y cuidados correspondientes, adquiere una estética particular.
Descripción de la rosa del desierto
La rosa del desierto tiene un tallo ancho suculento que se va ensanchando a través del tiempo. Las hojas son ovaladas, las flores tienen forma de trompeta y posee una estructura uniforme similar a cualquier tipo de rosa.
Las tonalidades son degradantes con bordes profundos y fuertes. Por otro lado, crece en una altura promedio de 11 centímetros, con una anatomía resistente. Aparece en colores festivos, como: blanco, rojo, rosado y morado. En sus versiones más claras.
¿Dónde crece la rosa del desierto?
Como se mencionó anteriormente, la rosa del desierto es una flor originaria de África, por lo que sus condiciones de crecimiento están íntimamente ligadas con las condiciones ambientales de esta zona. Es una planta que crece en áreas grandes, siempre y cuando el clima sea cálido y brillante.
En total existen cinco tipos de rosas del desierto. Siguiendo la misma filosofía de crecimiento, que es en tierras áridas o semiáridas, adaptándose a los climas tropicales característicos de un desierto. Es normal encontrarla en américa del norte donde haya un ambiente cálido.
Y aunque necesita agua para hidratarse, es una flor que resiste las temporadas de sequía. Gran parte debido a que almacena el líquido en el talló, razón por la que a veces se ve ensanchado. La mejor temporada para su cultivo es en primavera o verano, evitando los meses fríos de invierno.
¿Cómo cultivar una rosa del desierto?
La rosa del desierto funciona como compañera de maceta de un cactus, pero también para un jardín elegante o en una terraza bien preparada. Sea donde quieras apostar por esta flor, debes colocarla en el lugar más brillante de la zona, sin importar que la exposición sea demasiada, ya que resiste estas condiciones.
Lo siguiente sería fertilizarla y regarla constantemente, sin abusar de la cantidad de líquido. Es una flor resistente y autónoma, no necesita demasiada vigilancia ya que se va adaptando a las exigencias climáticas. También resiste las enfermedades y plagas comunes, por lo que no tendrás que andar podando a cada rato para mantenerla en buen estado.
¿Qué tener en cuenta al cultivar una rosa del desierto?
Al momento de cultivar una rosa del desierto debes tener en consideración algunos elementos básicos, como el suministro de agua. El riego debe hacerse una vez al día, evitando remojar el suelo y solo cuando la superficie se encuentre seca.
Por otro lado, la temperatura debe estar entre los 50F y los 60F, algo sumamente normal en primavera y verano. En el mismo orden de ideas, el suelo debe tener un pH ligeramente acido, con unas condiciones de drenaje favorecedores a la retención de líquido.
Consejos para cuidar a la rosa del desierto
A continuación, te mencionaremos algunas nociones para el cuidado de las rosas del desierto. A pesar de que son autónomas, hay que estar atento a los cambios temporales. Los consejos son los siguientes:
- El alimento tiene que ser ligero, como un fertilizante líquido combinado con poco de riego.
- Como bien se mencionó anteriormente, la flor nunca debe inundarse. Para eso es preferible cultivarla en contenedores o macetas en las terrazas.
- Cuando llegue el invierno, debes llevar a la planta al interior, con la finalidad de que descanse mejor. Es más fácil de gestionar y no ocupa mucho espacio.